Doctor Juan Carlo Amatucci.Equipo Diocesano de Comunicación

Encuentro de Mons. José María Arancedo 

con la prensa.

Arzobispo de Santa Fe y Presidente de la 

Conferencia Episcopal Argentina.

Buenos Aires, 30 de noviembre de 2011 – Monseñor Arancedo, Arzobispo de Santa Fe y Presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, se reunió hoy con periodistas especializados en temas religiosos de diversos medios nacionales, con el objetivo de “reiterar una actitud de diálogo en el marco de ese respeto cordial que crea confianza y acorta distancias”.
Al iniciar el encuentro se refirió a la actividad dentro y fuera de la Iglesia: “La tarea ‘ad intra’ la considero la más importante porque hace a nuestra identidad. Iglesia sé lo que eres, siempre será el mayor desafío”.
Con respecto a las acciones ‘ad extra’ habló del documento “Hacia un Bicentenario en Justicia y Solidaridad (2010-2016)” y resaltó la importancia de recuperar el valor de la familia y el respeto por la vida en todas sus etapas; avanzar en la reconciliación entre sectores y en la capacidad de diálogo; afianzar la educación y el trabajo como claves del desarrollo y de la justa distribución de bienes. “En este sentido, -afirmó-la preocupación por lo social y la opción por los pobres siempre van a ser temas presentes en la agenda eclesial”.
Valoró reiteradamente la tarea del periodista en los medios: “Reconozco y valoro sus trabajos al servicio de la comunidad, por ello deseo un diálogo sincero y responsable”. Y afirmó: No se podría pensar una cultura sin la presencia de los medios como testigos de verdad”.
Al preguntarle acerca de la preocupación de la Iglesia por la depreciación de la cultura por parte de algunos sectores, respondió: “Es una cultura difusa en la cual se han perdido valores, referencias, principios y esto va erosionando no solamente la cultura en sí sino las relaciones, que se van deteriorando”. Habló también del problema que supone considerar a la libertad como un absoluto y de la importancia de encarnar los valores. “Tenemos una cultura de valores que todos compartimos a grandes rasgos pero debemos hacerlos historia personal, hábitos de nuestro operar”.
Entre las preguntas surgió también el tema de la reconciliación: “Es un acto de madurez política”, y continuó diciendo “la reconciliación es una superación que supone la verdad y la justicia pero abre a un horizonte nuevo de encuentro hacia el futuro. Es un acto de grandeza, no de debilidad”.
Al finalizar el encuentro, Monseñor Arancedo concluyó: “Son muchos los temas que irán surgiendo, pero siempre será la mirada de pastores la que motivará nuestra palabra, presencia y compromiso. Espero poder servir a la Iglesia y desde ella a mis hermanos”.
   ECOSCEA
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